La disolución fue dispuesta a través del Decreto 1094/24. La Comisión ayudaba a capitalizar instituciones que otorgaban créditos a microemprendedores del país. El ministro Sturzenegger celebró la medida como el fin de «otro de los tantos curros disfrazados de fomento de la economía social».

En la mañana de este viernes, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, celebró en sus redes que a través del decreto 1094/24, el presidente Javier Milei disolvió la Comisión Nacional de Coordinación del Programa de Promoción del Microcrédito para el Desarrollo de la Economía Social, conocido popularmente como Conami.

Este organismo había sido creado en 2006, a través de la Ley 26.117, para ayudar a capitalizar instituciones que otorgaran microcréditos a microemprendedores del país. El cumplimiento de la devolución de los préstamos permitía la expansión de la iniciativa, mientras colaboraba con robustecer los emprendimientos productivos.

Pese a esto, Sturzenegger celebró su disolución como el fin de «otro de los tantos curros disfrazados de fomento de la economía social».

El ministro aseguró en sus redes que «el 99,85% de la plata se esfumó (en intermediarios), se regaló o se mal prestó» y afirmó que «el sistema no estaba hecho para ayudar sino para sostener una amplísima red de militancia e intermediarios».

Como viene ocurriendo con otros organismos nacionales, la gestión de Javier Milei, incluso si sus críticas fuesen ciertas, en lugar de corregir los errores o las desprolijidades, apela a la disolución del organismo; restándole al sector microemprendedor de una herramienta de capitalización y financiamiento.

En la misma web del Gobierno nacional, la página de la Conami expresaba que el objetivo del organismo era «generar un sistema de economía circular que articule la diversidad de recursos de cada comunidad para generar más y mejor trabajo»; impulsando «la producción local y la autonomía de las personas».

«A través de los Microcréditos ayudamos a los emprendedores que no puedan acceder al sistema financiero formal a que sigan adelante con sus proyectos», concluía.