El músico la despidió en las redes sociales
Desde hace tiempo resistía en una internación domiciliaria. “Rogamos por su descanso en paz tras años de lucha conmovedora y desigual contra la enfermedad”, dijo el cantante Mario Rubén González sobre la madre de sus cuatro hijos.
Teresa Sainz de Los Terreros, la mujer del cantante argentino conocido como Jairo, murió este jueves. Así lo confirmó el propio cantante, a través de un comunicado. En el mismo expresó las dificultades de salud que la mujer venía luchando desde hace nueve años.
“Con infinito dolor comunico el fallecimiento de Teresa Sainz de los Terreros, mi amada esposa y madre de mis hijos. Agradecemos los mensajes de cariño. Hoy rogamos por su descanso en paz tras años de lucha conmovedora y desigual contra la enfermedad. Gracias por el respeto”, expresó el artista.
Juntos desde hace casi 50 años
Jairo y Teresa se casaron en 1972 y formaron una numerosa familia con cuatro hijos: Iván, Yaco, Mario y Lucía. Su historia de amor comenzó casi 50 años atrás en Madrid, donde ella vivía. Fueron presentados por una amiga en común un diciembre y desde entonces nunca más se separaron.
«49 años que dijimos un SI como la vida misma. Estas fotos fueron en Madrid, en un glorioso verano de 1986. ✨❤️. Comparto este aniversario con ustedes. Gracias por las buenas vibras», publicaba Jairo en su cuenta de Instagram, hace unas semanas.
Acualmente, a excepción de Yaco, el manager de Jairo, sus hijos están viviendo en Europa. Debido a la situación sanitaria y actuales restricciones, no es seguro que puedan viajar a despedir a su madre y encontrarse con su familia.
EPOC, la enfermedad que padecía la mujer de Jairo
La enfermedad de base de su esposa era una EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) de grado GOLD severo. Es una enfermedad respiratoria en el que se vive con un porcentaje mínimo de los pulmones. Además había sufrido un cáncer de mama en el pasado, contó Jairo a los medios en diciembre del año pasado.
En ese entonces explicó las circunstancias que le tocaban atravesar a su mujer, quien ya sufría además dificultades para comunicarse. Jairo contó que se comunicaban de otras maneras, una de ellas, era la música: él solía cantarle.
