Es una tira reactiva en la que dos líneas se tiñen de púrpura en presencia de anticuerpos contra el virus; tiene una precisión de entre 80 y más de 90%; acaba de ser aprobado por la Anmat

En tiempo récord, un equipo multidisciplinario de investigadores de la Universidad Nacional de San Martín (Unsam) desarrolló un kit diagnóstico para detectar el dengue sin necesidad de equipos complejos ni profesionales especialmente entrenados, en forma descentralizada y a bajo costo.

Fue validado con muestras del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez. Lo producirá Chemtest, una compañía tecnológica incubada en la misma casa de estudios especializada en diagnóstico de enfermedades infecciosas.

El dispositivo consiste en una tira reactiva similar a la que se emplea para el test de embarazo. Ya está disponible para su uso en el país y podría ser exportado.

«Estamos muy contentos porque logramos un producto comercial a partir de un desarrollo de ciencia básica, algo que pocas veces se logra -afirma Juan Ugalde, decano del Instituto de Investigaciones Biotecnológicas (IIB) y uno de los líderes del proyecto-. Venimos trabajando en enfermedades infecciosas desde hace muchos años. Hicimos la vacuna y un test de diagnóstico para la brucelosis. También investigamos en síndrome urémico hemolítico y obtuvimos un producto comercial que es bastante único en el mundo para su diagnóstico en chicos».

Hace algo más de cuatro años, los científicos decidieron crear la empresa de base tecnológica con un programa de financiamiento del Ministerio de Ciencia y Tecnología para dedicarse a desarrollar, producir y comercializar kits diagnósticos tanto para la salud humana como la animal en dos formatos: el clásico Elisa (que requiere equipamiento y personal especializado) y los sistemas llamados point of care, o POC, que permiten tener un resultado en minutos y con muy poco volumen de muestra.

Los kits de diagnóstico
Los kits de diagnóstico
«Hablando con personas de las municipalidades del conurbano, nos decían que uno de los problemas que tenían con el protocolo de atención para esta enfermedad era mandar las muestras al sistema centralizado, porque en el pico del brote no les vuelve el resultado que les sirve para identificar las zonas de más alto riesgo -cuenta Diego Comerci, biólogo y doctor en biotecnología del IIB y cofundador de Chemtest-. Entonces se nos ocurrió que si sabíamos hacer muy bien tiras reactivas de diagnóstico rápido podíamos diseñar una específica para esto».Cumpliendo con el espíritu del instituto de generar soluciones para problemáticas locales, se pusieron manos a la obra para obtener un test que permitiera descentralizar el diagnóstico y prescindir de equipos costosos y cadena de frío. Así, la persona que recibe el caso sospechoso puede tomar una pequeña muestra de sangre, coloca la tirita en un tubito o casete y en minutos tiene el resultado.

Una vez tomada la decisión, le plantearon el problema al virólogo Diego Álvarez, doctorado con Andrea Gamarnik, investigadora del Conicet en la Fundación Instituto Leloir y referente internacional en la biología del virus (ver aparte).