El albiazul igualó 1 a 1 en Sarandí en un partido con muchos accidentes. Fueron expulsados Valoyes y Godoy, Herrera tapó un penal clave sobre el final. Muchas emociones en un equipo que tampoco despega.
Tuvo de todos los ingredientes el empate de Talleres ante Arsenal de Sarandí, y por más que haya empezado ganando, por cómo se dio el partido, el punto tiene un gran sabor y mucho valor. Fue 1 a 1, con dos penales errados (uno por equipo), un mal arbitraje de Darío Herrera y el valor agregado fue que el equipo de Alexander Medina terminó jugando con dos hombres menos por las expulsiones de Diego Valoyes y Leonardo Godoy.
Terminó con línea de cinco en defensa y solo Parede de delantero el conjunto albiazul, impropio por cómo se había dado el encuentro aunque mas allá del mérito de la resistencia, debe haber autocrítica por su respuesta en el partido, más allá de lo accidentado.
Y eso que empezó ganando cuando a los 26 minutos Parede capturó el rebote de un penal ineficiente ejecutado por Fragapane. Desvío en un defensor y esta vez quedó indefenso Sappa, que nada pudo hacer para evitar el gol. El dilema comenzó con una insignificante jugada donde el juez expulsó a Valoyes por segunda amarilla, por una discusión con García.