Escuchas ilegales: abogados exigen que la Bicameral de Inteligencia controle a la AFI

Ante la gravedad de la grabación y difusión de escuchas ilegales a presos kirchneristas, desde la Asociación Civil Iniciativa Justicia le exigieron a la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia que controle las acciones de la ex SIDE.

Según manifestaron en la presentación realizada hoy, desde la Agencia Federal de Inteligencia «fueron ordenadas tareas prohibidas» por la ley que regula al organismo como «investigación y obtención de información de personas vinculadas a la actividad política y gremial, sin autorización judicial» y el «tráfico de influencias para obtener decisiones de jueces y fiscales, contrarias a derecho». Incluso, sostuvieron, miembros de esa Asociación Civil fueron víctimas de estas actividades ilegales.

Pero los espías no actuaron solos, manifestaron los abogados, sino «de consumo con periodistas de grandes medios de comunicación» porque «la opinión pública es el espejo en el que se miran la mayoría de las instituciones al momento de tomar decisiones».

Por eso, le exigieron a la comisión que controla a la ex SIDE, presidida por el radical Juan Carlos Marino,  que se proceda una auditoria para destruir de forma documentada «todas aquellas grabaciones o transcripciones de conversaciones telefónicas, intercambio de mensajes y/o correos electrónicos que posea la AFI» por haber pinchado teléfonos sin que esas comunicaciones tengan algún interés para el juez que las ordenara, como en el caso del penal de Ezeiza

Ante la gravedad de la grabación y difusión de escuchas ilegales a presos kirchneristas, desde la Asociación Civil Iniciativa Justicia le exigieron a la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia que controle las acciones de la ex SIDE.

Según manifestaron en la presentación realizada hoy, desde la Agencia Federal de Inteligencia «fueron ordenadas tareas prohibidas» por la ley que regula al organismo como «investigación y obtención de información de personas vinculadas a la actividad política y gremial, sin autorización judicial» y el «tráfico de influencias para obtener decisiones de jueces y fiscales, contrarias a derecho». Incluso, sostuvieron, miembros de esa Asociación Civil fueron víctimas de estas actividades ilegales.

Pero los espías no actuaron solos, manifestaron los abogados, sino «de consumo con periodistas de grandes medios de comunicación» porque «la opinión pública es el espejo en el que se miran la mayoría de las instituciones al momento de tomar decisiones».

Por eso, le exigieron a la comisión que controla a la ex SIDE, presidida por el radical Juan Carlos Marino,  que se proceda una auditoria para destruir de forma documentada «todas aquellas grabaciones o transcripciones de conversaciones telefónicas, intercambio de mensajes y/o correos electrónicos que posea la AFI» por haber pinchado teléfonos sin que esas comunicaciones tengan algún interés para el juez que las ordenara, como en el caso del penal de Ezeiza