“El FMI está de nuevo en Argentina. Le acaban de dar 9600 millones de dólares al gobierno de Macri para permitir que inversores y oligarcas conviertan a dólares sus activos en pesos y los saquen del país. Recursos públicos internacionales utilizados para apoyar a un derechoso extremo y facilitar la fuga de capitales”, escribió el ex ministro de Finanzas de Grecia, Yanis Varoufakis, en su cuenta de Twitter. El economista de la Universidad de Atenas cuestionó el accionar del organismo que habilitó al gobierno a vender dólares del préstamo para intentar frenar el dólar.
El Directorio del Fondo todavía debe validar la inédita decisión que generó resistencias entre los miembros del staff que siguen el caso argentino. Esa definición y la autorización para el nuevo desembolso por unos 5500 millones de dólares tendrán lugar cuando finalice la evaluación del staff del FMI. Después de visitar Buenos Aires la semana pasada, la misión volvió a Washington para continuar desde allí con su supervisión.
EL SAQUEO FINAL El gobierno de Cambiemos despilfarró en un mes el 83% del último giro del FMI
“Apoyan a un derechoso extremo”, reprochó Varoufakis el acuerdo con el FMI.
Uno de los economistas que tuvo que lidiar con el FMI y sabe de los costos de acordar con el organismo es el ex ministro griego. Varoufakis asegura que la crisis en su país todavía no terminó, aunque logró sacarse de encima el programa con el Fondo. De todos modos, Grecia le debe alrededor de 10.500 millones de dólares y figura como el tercer deudor más importante detrás de la Argentina y Ucrania. A través de su cuenta en redes sociales, el economista le apuntó al FMI y al gobierno argentino por la profundización del ajuste y el endeudamiento para financiar la fuga de capitales. Refirió que es el mismo proceso que hundió a su país. El desempleo, por caso, se mantiene en Grecia en niveles elevados. El último registro oficial alcanzó a 18,5 por ciento.