Alcanzó este lunes el nivel máximo de 2019, en medio de tensiones financieras y la incertidumbre por las elecciones presidenciales de octubre.
El riesgo país alcanzó este lunes el nivel máximo de 2019, en medio de tensiones financieras y la incertidumbre por las elecciones presidenciales de octubre. El índice terminó en los 810 puntos, por lo que batió su récord aunque todavía no llegó a tocar el punto máximo que registró a fines del año pasado, cuando había alcanzado los 833 puntos. Mientras tanto, los inversores esperan el resultado de las licitaciones de letras del banco central y del Tesoro.
Operadores coincidieron en que la escalada del referencial confeccionado por el banco JP.Morgan revelaba las crecientes dudas de los inversores, en momentos de presión cambiaria, alta inflación y preocupante recesión.
Los bonos soberanos en la franja extrabursátil promediaron un retroceso del 1,2%, encabezados por las emisiones dolarizadas. Las ventas se profundizaron hacia el final de los negocios, con desarmes de posiciones por coberturas.
“El apetito por riesgo global resulta una condición necesaria pero no suficiente, ya que los inversores se encuentran principalmente concentrados en los ruidos electorales y los desafíos económicos, y de ahí las castigadas valuaciones de los bonos y acciones”, explicó Gustavo Ber, economista titular de la consultora Estudio Ber, según fuentes de la agencia Reuters.
Por otro lado, el índice accionario S&P Merval tuvo una mejora del 1,39%, al cierre provisorio de 33.122,32 puntos, por compras selectivas como colchón ante la presión cambiaria, una tendencia liderada por papeles de alta liquidez de los segmentos financiero y energético.
En ese marco, operadores agregaron que se espera para los próximos días una mayor liquidación de dólares de los exportadores cerealeros, más la oferta de 60 millones de dólares comprometidos por el Tesoro desde el lunes entrante.
