El legislador Quinteros dijo que la cuestionada firma brasileña “levantó campamento” y deja construcción de gasoductos troncales

No fueron pocas las ocasiones, inclusive en medio de la disparada confirmación de parte de Odebrecht de haber pagado sobornos para obtener licitaciones, que en Córdoba se intentó distanciarla de cuestiones oscuras en la provincia.

Varios funcionarios, con el gobernador Juan Schiaretti a la cabeza, recalcaron que en el territorio “no se pagaron” coimas en los procesos para la construcción de gasoductos troncales, en su momento con ofertas «a las que era muy difícil decirles que no».

En los últimos tiempos, el Gobierno reconoció la demora en algunas obras, y el librado de multas por la cuestión. El planteo era la igualdad de trato para todas las empresas, pero los reclamos eran múltiples.

En las últimas horas, el legislador del Frente Cívico, Juan Pablo Quinteros, dijo que la constructora de origen brasileña “levantó campamento” con las tareas en tierras cordobesas.

Refirió, a su vez, que los directivos locales “se fueron”, que hay “mucha gente que se queda sin cobrar”, y estimó la deuda actual en cuatrocientos millones de pesos