En medio de una nueva corrida del dólar y mientras la economía se derrumba, el presidente Mauricio Macri sigue sin reconocer los errores de su gestión y echa mano a la meteorología para describir el fracaso de las políticas vigentes. “Seguimos enfrentando tormentas pero no vamos a parar”, señaló desde Vaca Muerta apelando nuevamente a su metáfora predilecta para evitar hablar de la crisis que compromete el presente y el futuro del país. A pesar de que el dólar ya trepó a 32,60 pesos, la economía cae 6,7 por ciento y los pronósticos de inflación superan el 32 por ciento, Macri sólo se limitó a invocar de manera genérica “problemas propios y del mundo”.