“Estamos atravesando una tormenta”, fue la metáfora que utilizó el presidente Macri para referirse a la grave crisis económica. Las Pymes no escapan al modelo Cambiemos.

Por: Facundo Piai – Especial para La Nueva Mañana

Las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPyME) constituyen un tejido fundamental en la generación de riquezas de la economía del país. También, son un factor determinante para el desarrollo de la economía doméstica, con quien mantienen una relación simbiótica, en el sentido de que se apoyan y constituyen mutuamente beneficiándose una del crecimiento de la otra, y viceversa.

De acuerdo a información proporcionada por el Indec en el último Censo Nacional Económico (realizado en el año 2004-2005), las MIPyMEs representan poco más del 99% de los establecimientos. En consecuencia, son un factor clave en la oferta de trabajo al emplear el 66,3% de los asalariados en blanco.

Si contemplamos el valor agregado que genera el sector vemos que aventaja a las grandes empresas sólo por algunas centésimas, puesto que hay una gran porción de pymes dedicadas a la intermediación comercial.

Un relevamiento del período 2003-2012 que IERALpyme, instituto de la Fundación Mediterránea, realizó sobre el desempeño de las pymes, señala que en los años de expansión económica “las MIPyMEs explicaron entre el 50% y 80% de los nuevos puestos de trabajo”.

Del mismo modo, en los años de crecimiento exiguo y moderado, el rol de este sector en la creación de puestos de trabajo de calidad supera el de las grandes empresas. Luego de la debacle financiera mundial del 2008, ocasionada por la crisis de las hipotecas subprime, “en 2009 las grandes redujeron su ocupación mientras que las pymes la mantuvieron”.

Este informe publicado durante la gestión anterior a Cambiemos concluía que había tres factores principales que generaban oportunidades para estas empresas, uno de ellos era el financiamiento subsidiado y los diversos programas de apoyo gubernamental; otro era la importación barata de maquinarias e insumos para el sector productivo; y la protección frente al arribo del país de bienes de consumo producidos en otras economías con otras variables.

Un decreto que golpeó a las pymes sumado a la importación indiscriminada

De lo anterior se desprende que las políticas de Cambiemos que afectan a estos tres factores virtuosos repercuten negativamente a la performance de las pymes. Es el caso del decreto 137/2018 promulgado a principio de este año que dejó sin efecto al Fondo Nacional de Desarrollo para la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (FONAPYME), cuyo objetivo era brindar financiamiento y aportes de capital para inversiones productivas a las PyMes.

Del mismo modo, la apertura de las importaciones también afecta las condiciones económicas propicias para el desarrollo del sector analizado. De acuerdo al informe técnico de Indec sobre comercio exterior del mes de mayo del 2018, en los cinco primeros meses del año “las exportaciones totales acumuladas aumentaron 7,1% respecto de igual período del año anterior (1.644 millones de dólares)”, mientras que las importaciones acumuladas “aumentaron 17,9% (4.468 millones de dólares)”.

Si analizamos el volumen de exportaciones vemos una caída en productos primarios, manufacturas de origen agropecuario y de origen industrial. Mientras que la cantidad de importaciones en los primeros cinco meses aumentaron notablemente, motorizada por automóviles, bienes de consumo y accesorios para bienes de capital.