El Indec mostró lo que es imposible de esconder: un nivel de deuda externa como pocas veces se ha visto en el país. Al 31 de marzo de este año se estimó en más de 250 mil millones de dólares, muy superior al trimestre del año anterior.

La deuda externa sigue creciendo. Según los propios datos del gobierno, el país se endeuda a razón de USD 213 millones por día, de los cuales USD 165,3 millones diarios fueron contraídas por el Estado y el Banco Central.

La excusa del macrismo para el nivel de endeudamiento es reducir el déficit fiscal y la dependencia de emisión monetaria, pero a costas de hipotecar el futuro de los argentinos.

Según las estadísticas del Indec, desde el cambio de Gobierno, en diciembre de 2015, la deuda externa pública creció a un ritmo de USD 91 millones por día; pero en los pasados 12 meses se intensificó.

Tal como consignó Infobae, en esos períodos también se acrecentó la deuda del sector privado y el sistema financiero en su conjunto, pero en proporciones notablemente menores.

A fin de marzo de 2018, el 60% de la deuda correspondía al Gobierno general; 9% al Banco Central; 3% a las sociedades captadoras de depósitos, el 1% a otras sociedades financieras y el 27% a sociedades no financieras.