Fue publicado este miércoles en el Boletín Oficial. Ratifica así su postura de 2017 y aprovechó para quitarle poder a CTERA.
Después de un arduo proceso de lucha docente en 2017, el gobierno nacional publicó este miércoles un controvertido derecho, que ratifica su postura del año pasado: no discutir el piso salarial de los trabajadores del sector.
En el período pasado, la gestión central evitó cumplir con la Ley 24.049 de Financiamiento Educativo, que disponía la negociación entre el Poder Ejecutivo y los gremios del sueldo mínimo.
Por el contrario, dispuso hoy, a través del decreto 52/2018, que el salario mínimo docente “no podrá ser inferior al veinte por ciento del Salario Mínimo, Vital y Móvil (MVM)” vigente a ese momento.
Allí radican las críticas que realiza el secretario general de a Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) Juan Monserrat, que aduce que al MVM “no lo discuten, sino que lo aplican por decreto”. La decisión no es menor para los trabajadores, ya que de algún modo la negociación de los trabajadores de la educación era “la referencia” para las discusiones a nivel provincial.
Con los números de hoy, el salario mínimo docente a 11.400 pesos y de $ 12.000 en junio próximo.
“El panorama es incierto para muchos de los que sólo vivimos del salario, y que esperamos que el Gobierno sea un sujeto actuante en la distribución del ingreso. Seguramente nos va a ir muy mal” graficó Monserrat a radio Universidad.
De ahora en adelante, los cónclaves entre gremios y el Gobierno se reducirán a “cuestiones laborales generales que integran la relación de empleo de los trabajadores docentes de las jurisdicciones provinciales y de la Ciudad”.
El decreto en cuestión también modifica la forma en la que se compondrá la mesa de discusión de parte de los trabajadores, ya que cada uno de los cinco gremios llevará un representante. El perjuicio, en tal sentido, es para la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), el sindicato con mayor cantidad de afiliados, que pierde preponderancia al eliminarse la proporcionalidad de ahora en más.