El nuevo esquema tarifario se aplicará desde diciembre de este año según lo anunció el ministro de Energía de la Nación.
El Gobierno nacional anunció los nuevos valores de las tarifas de electricidad para usuarios residenciales que aumentarán un 34% y las de gas que treparán hasta un 57% más arriba, entre diciembre de 2017 y febrero de 2018
El ministro de Energía, Juan José Aranguren estimó que en el área de Capital Federal y Gran Buenos Aires, entre 6 y 7% del ingreso mensual de los hogares estará destinado a pagar el servicio de gas y electricidad.
Esos aumentos sumarán 1,2 punto a la inflación «lo que sucederá por única vez», según indicó el ministro en una conferencia de prensa para detallar los nuevos ajustes de luz y gas, que ya están vigentes desde este viernes en todo el país.
En ese marco, el funcionario del gobierno de Macri detalló que el aumento promedio que va a recibir un usuario de electricidad será del 19% desde diciembre de este 2017 y del 12% a partir de febrero de 2018, con un acumulado del 34% para el segundo mes del año que viene.
El funcionario calculó que con este nivel de ajuste, “quienes consumen entre entre 0 y 150 kw pasarán a abonar 65 pesos más en diciembre y 45 pesos más en febrero”, esto suma unos 110 pesos más de lo que viene pagando cada usuario por mes.
Además «Para el 30% de los usuarios, la factura estará en febrero por debajo de los 261 pesos; para un 50%, la factura máxima será de 540 pesos», estimó Juan José Aranguren.
El Ministro añadió que quienes cuenten con el beneficio de la tarifa social, pagarán un mínimo de 55 pesos desde este mes.
Asimismo Aranguren garantizó que para este verano, habrá energía suficiente para atender la demanda, más allá del incremento que puede producirse por las altas temperaturas.
«No tenemos ninguna duda que tenemos suficientes reservas para aguantar temperaturas extremas durante el verano. Este verano va a ser mejor que el anterior, que ya había sido mejor al de 2015», resaltó Aranguren y destacó, también, que en dos años de gobierno se han «adjudicado 10 mil megaewatt de energía».
Con relación al gas, Aranguren explicó que las tarifas residenciales sufrirán un incremento del 27 al 47% en las distintas bandas -entre este mes de 2017 y febrero de 2018- y las comerciales del 38 al 58%, «incluidos el precio del gas, del transporte y la distribución».
Así, detalló que la factura media residencial -que abona el 36% del total de usuarios- pasará de 127 a 201 pesos mensuales; otro 21% abonará entre 250 y 500 pesos.
El funcionario afirmó que el Estado nacional seguirá subsidiando el 38% del gas natural que se consume, y puntualizó que, en el caso de la Patagonia, los subsidios son mayores, ya que esa región consume casi seis veces y media más que el resto del país.
También, garantizó la continuidad de la tarifa social, que abarca a 1,8 millón de hogares (sobre un total de 8,1 millones).
Aranguren evaluó que «venimos de un sistema que nos llevó a ser importadores del 95% del gas natural que estamos consumiendo y por eso, tenemos que recuperar la inversión para tener precios cada vez más bajos de la energía».
Por último, el ministro subrayó: «continuamos tratando de normalizar los sectores del gas y la electricidad para que los subsidios vayan a quienes los necesitan.
Vamos por un sistema más equitativo, justo y federal para garantizar la seguridad energética».
Es importante destacar que el presente es un nuevo incremento de tarifas que aplica el Gobierno Nacional y que con estos aumentos, la inflación en diciembre que tiene un piso de 1,7% se acercará a un 2,8%, según el cálculo de la consultora Elypsis.
Es de esperar también que los nuevos precios de los combustibles impacten en el trasnporte en general y por ende en el precio de esos servicios y los productos transportados, lo que echaría por tierra las expectativas del gobierno de Macri para controlar la suba inflacionaria.