En cualquier otra circunstancia de gobiernos democráticos sería un escándalo. Se reunieron en secreto Maurico Macri, Daniel Angelici, Gustavo Arribas y Germán Garavano para salvar al hermano del juez Ariel Lijo, que casualmente tiene en su despacho la causa del Correo que compromete seriamente al presidente.

Lijo por ahora puede respirar tranquilo: el Consejo de la Magistratura frenó la citación a declarar a su hermano, el operador, svudsfo de lobbista judicial, Alfredo, según pudo reconstruir La Nación de cinco fuentes oficiales de diálogo cotidiano con Macri.

Así Cambiemos desde el poder que da el ejecutivo a su cargo, con total normalidad, metió mano en la independiente justicia y levantó ayer del temario del Consejo de la Magistratura la citación a «Freddy» Lijo.

Cuando la República no existe, la impunidad crece y cada vez lo disimulan menos.